Nació el 2 de febrero de 1965. Entró a trabajar al subte de Buenos Aires el 24 de julio de 2013. Su primer lugar de trabajo fue en el Taller Rancagua. Luego fue Auxiliar de Estaciones en la línea B. Esposo de Carolina papá de tres hijxs. Uno de ellxs es peón en la línea E.
Nació el 4 de noviembre de 1950. Ingresó al subterráneo de Bueno Aires en 1973, en la línea A. Fue peón de limpieza, guarda, conductor, maniobrista y supervisor de tráfico . Se fue de la empresa por baja médica por accidente en 2002. Esposo de Myriam, papá de Gabriel y Jésica, guarda en la línea H.
Nació el 19 de julio de 1968. Entró a trabajar al subte de Buenos Aires con 21 años. Siempre fue parte del sector Energía, su lugar de trabajo era toda la red, su base, la subestación Carlos Pellegrini de la línea B. Feliz abuelo y fanático hincha de boca.
La exposición laboral al asbesto puede ser directa o indirecta y se le ha prestado mayor atención debido a que el asbesto o amianto tiene una gran cantidad de usos en industrias como la construcción, la naval, la automotriz, la aeronáutica, la ferroviaria, la del petróleo y petroquímica, entre otras. Lxs trabajadorxs que están involucradxs en la fabricación, instalación y mecanización de productos que contienen asbesto presentan un evidente riesgo a la exposición laboral.
En el subte el asbesto se usó y todavía está presente en múltiples elementos y componentes de trenes, cuartos técnicos e instalaciones. Al realizarle mantenimiento, se interviene y manipulan, generando la liberación de fibras al ambiente, pero no solo esto genera la dispersión de fibras, sino su simple uso. Por ejemplo, todos sentimos la fuerza del paso del aire que desplaza cada formación al pasar por las vías, este aire erosiona estos materiales, al Igual que un contactor que se acciona un centenar de veces, va desgastando con cada accionar el asbesto presente en él. Otro factor importante es el paso del tiempo, ya que estos materiales tienen una media de 20 años de instalados y, junto con agentes naturales, el material envejece debilitando su estructura y liberando las fibras.
En 1991 nuestra legislación comenzó a regular el uso de asbesto, evidenciando su peligrosidad y restringiendo sus límites, obligando a las empresas que lo usaban a implementar medidas de seguridad y la realizar estudios médicos específicos con una vigilancia a la salud. En el Subterráneo y premetro esto nunca llegó.
¿Por qué estamos expuestos si el asbesto se encuentra prohibido en Argentina?
Si bien la prohibición fue muy buena para minimizar el ingreso de nuevos materiales con asbesto a los distintos ámbitos, en el subte, como en tantas otras industrias, esta prohibición no garantizo la eliminación del asbesto instalado, ni que los trabajadores dejemos de trabajar con él. A 20 años de su prohibición los materiales instalados previamente a ella continúan en su lugar presentan un deterioro que debe ser evaluado y planificar su retiro.
Existen límites formales de concentración de asbesto en aire establecidos en la legislación vigente, pero no debe confundirse con exposición segura, no existen dosis mínimas que garantice que por debajo de ellas no se desarrollen enfermedades, por eso se descarta en el mundo el concepto de uso seguro de asbesto y se busca su eliminación.
Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo (INSHT, España)
Exposición de las personas que habitan en las cercanías de concentraciones de asbesto (minas, plantas industriales, etcétera) o, como en nuestro caso, de quienes utilizan del subte.
Exposición de lxs familiares que viven con el trabajador o la trabajadora expuestx laboralmente, en particular quienes tienen contacto con su ropa. A través de ésta, las fibras de asbesto viajan del trabajo a la casa.